ÁGORA TEATRAL
  XAVIER ROJAS
 

In Memoriam, Xavier Rojas (1921-2010)

El mundo escénico lo atrapó por completo.

Por:
Salvador Perches Galván

 

“Hago Teatro porque lo tengo en
mi corazón, éste ya está viejo, muy
viejo, pero seguiré haciéndolo mientras
siga palpitando.”
Xavier Rojas.

 


En 1921, sin mediar explicación alguna y sin fecha definida desaparece la Escuela Nacional de Arte Teatral.  En febrero se lleva a cabo la inauguración del teatro Olimpia, ubicado en Avenida 16 de Septiembre nº 11. En marzo regresa a nuestro país la Compañía Dramática Española de María Guerrero y Fernando Díaz de Mendoza para presentar, entre otras obras, El desdén con el desdén, El abanico de lady Windermere y La malquerida. Como parte de su elenco vuelve a su patria la actriz mexicana Dora Vila, aunque sólo permanece aquí durante la gira.

En junio debuta en el teatro Principal la Compañía de Espectáculos Modernos Folies Tarazona, que se destaca por sus producciones espectaculares a cargo de los hermanos Tarazona.  

En septiembre, con motivo de los cien años de la consumación de la guerra de Independencia se realizaron diversos festejos que incluyeron la conformación de una Compañía de Opera del Centenario que realizó presentaciones por todos los teatros de la ciudad. Entre sus integrantes destacaban Fanny Anitúa, Claudia Muzio, Virgilio Lazari y Aureliano Pertile, entre otros.

También en septiembre se llevó a cabo el estreno de la revista teatral Aires Nacionales, escrita por Ortega, Prida y Castro Padilla, por encargo del gobierno, para celebrar el centenario de la consumación de la Independencia. Pese a un inicio flojo, la temporada resultó un éxito y la revista pasó a formar parte del repertorio de la compañía durante sus giras por la República y el extranjero. Así mismo, se lleva a cabo la presentación en el teatro Esperanza Iris de la Compañía de Revistas Neoyorquinas de Jack Mason.  

En Octubre, en el teatro Principal se presenta La marquesa Rosalinda, obra de Don Ramón María del Valle-Inclán (quien por cierto se encuentra en México con motivo de las fiestas del Centenario de la consumación de la Independencia), cuya interpretación corre a cargo de los alumnos de la Escuela Nacional de Arte Teatral.

El día tres del mismo mes, por decreto presidencial se crea la Secretaría de Educación Pública, que tendrá como primer titular al rector en ese entonces, de la Universidad Nacional, Lic. José Vasconcelos.

El 17 de noviembre nace en Madrid, España, la actriz Ofelia Guilmain.

En diciembre de 1921, con la asistencia del presidente Álvaro Obregón y del Secretario de Educación Pública, José Vasconcelos, se inaugura el teatro al aire libre de San Juan Teotihuacán. La función inaugural estuvo a cargo de Rafael M. Saavedra, quien presentó las obras La Cruz y Un Casorio, ambas interpretadas por actores indígenas. Y María Conesa estrena el mismo mes, en el teatro Colón la revista Kaleidoscopio, primer obra del joven autor de 17 años, Juan Bustillo Oro. A partir de ese mes circula un volante con el título de Actual nº 1. Esta hoja será reconocida poco después como el primer manifiesto de los Estridentistas, un grupo ecléctico formado por Manuel Maples Arce, Germán List Arzubide y Arqueles Vela, entre otros, que se propone modificar la actitud de la literatura respecto del arte y la sociedad.

Para finales del mes, y del año, el día 29 debuta en nuestro país la actriz argentina Camila Quiroga con su compañía de drama y comedia. Su repertorio destaca por incluir obras de autores ríoplatenses como Florencio Sánchez y Armando Mock; sin embargo, más sorprendente fue para el público mexicano la forma de interpretar los dramas, empleando los acentos y modismos de su tierra, en contradicción con la añeja tradición española de declamación. Su visita, que se repetirá a lo largo de la década, resultó detonante entre las nuevas generaciones que veían la necesidad de construir un teatro auténticamente nacional.

Un año, sin duda, con una relevante actividad cultural, y teatral, y regresándonos un poco en las efemérides de 1921, el 17 de agosto, nace Javier Moreno Monjarrás, mejor conocido en el ámbito teatral como Xavier Rojas.

Xavier Rojas nació en la ciudad de Puebla, en el referido año de 1921, año del bicentenario de la consumación de nuestra independencia. Estudió Teatro en la Escuela Nocturna de Arte para Trabajadores de la SEP; en la Escuela de Verano de la UNAM fue alumno de Francisco Monteverde, Rafael F. Muñoz y Miguel León Portilla. Cursó la carrera de Museografía en la ENA, y estudió en la Academia Cinematográfica de México. Fue actor y asistente de director en la Compañía Cinematográfica Las Americas; asistente de Producción de Álvaro Gálvez y Fuentes en la radiodifusora XEW, supliendo a Margarita Michelena.

Entró en contacto con el grupo de dramaturgos que integraban La Comedia Mexicana y escribió las obras Escándalos en el Olimpo, Mother Lake y Fruto Prohibido. Fundó Poliart, teatro estudiantil del IPN, realizando lecturas, ensayos y representaciones dentro del Casco de Santo Tomás y, es creador del Teatro Estudiantil Autónomo de México. Fue jefe del departamento del INJUVE y reorganizó las misiones culturales en la provincia mexicana. Fue comisionado del INBA como maestro en la Escuela Nocturna y la Escuela de Arte Teatral del INBA y jefe de museografía en el Museo Nacional de Antropología. También fungió como coordinador de Artes Escénicas del Consejo Nacional de Cultura y Recreación de los Trabajadores y fundó la Asociación Mexicana de Teatros para la Infancia y la Juventud, filial del Instituto Internacional del Teatro, dependiente de la UNESCO.

En su larga trayectoria recibió diversos premios, como Mi vida en el teatro y la medalla 50th Anniversary of ITI. International Theatre Institute y fue ratificado como director general del Instituto Andrés Soler.

Desde su infancia, el teatro fue su pasión, afirmaba Xavier Rojas no temerle a la muerte, pues aseguraba que la vida siempre le dio todo lo que quiso, y hasta más.

Acompañado por sus recuerdos, Rojas habitó los últimos años de su vida en la colonia Del Valle, rodeado de aquello que fue fundamental en su vida, dedicada al quehacer artístico, al teatro, que amó con pasión. El hombre de teatro siempre consideró haber sido bendecido por Dios el haberle permitido llevar a la escena lo que siempre persiguió: teatro de calidad y popularidad.

Al arribar a los 85 años de existencia, el director afirmaba: "Estoy en paz con la vida". El también dramaturgo, rememoraba que fueron los títeres de Rosete Aranda los que le sembraron, en su infancia, la semilla del arte escénico. Aunque Xavier señalaba que fue su abuelo quien realmente lo puso en el camino teatral, ya que fue él, quien lo llevaba en Puebla a ver los títeres de Rosete Aranda, que se presentaban en la Plazuela de San José, en una carpa-teatro muy bien armada y con un repertorio de obras portentosas.

Incrementó su gusto escénico en ciernes, adquiriendo sus propios títeres en los portales de su ciudad natal. Los había vestidos y sin vestir, para que quienes los adquirieran les fueran haciendo su vestuario. El títere de Bette Davis, fue el que mas le impactó, ella era entonces la gran estrella de Hollywood. El imaginativo niño fue haciendo su colección. Ya tenía a sus primeros actores, pero le faltaban las obras, para lo cual inventó anécdotas y diálogos. A los 10 de edad ya les daba funciones a los vecinos de su barrio.

La dama negra es la obra de infancia que mas recordaba, trataba sobre una reina que se enamoraba del jefe de la Revolución, con un inesperado final incestuoso, ya que los protagonistas resultaban ser hermanos.  

Su madre, quien trabajaba en la Biblioteca Palafoxiana, fue una activa luchadora por la libertad de enseñanza y la cultura general. Su padre, don Xavier Moreno, fue un poeta con un problema arraigado, el alcoholismo. Llegado el momento de elegir a que se dedicaría el resto de su vida, Xavier optó por dejar Puebla y estudiar ingeniería civil.

Sin embargo, el destino de Javier Moreno Monjarrás, ya estaba marcado desde su primer contacto con los títeres, a su llegada a México alternó sus estudios de ingeniería en el Instituto Politécnico Nacional con incursiones en el medio teatral, hasta que el mundo escénico lo atrapó por completo y para siempre, su destino era convertirse en Xavier Rojas.

Estando en el Poli se daba sus escapadas a ver muchas obras teatrales, lo que le permitió conocer a actores como María Tereza Montoya, Matilde Palow y las hermanitas Blanch. Tocó puertas para entrar al cerrado círculo teatral y se inició en un grupo de aficionados.

Xavier Rojas formó la compañía escénica de aficionados al teatro llamada Poliart con gente del Instituto Politécnico Nacional.

Su vida dio un giro radical, abandonó la ingeniería, posteriormente se incorporó a la radio y después al cine. Creo el teatro trashumante, fundó el Teatro Estudiantil Autónomo de México y Teatros Círculo, con Pedro Ramírez Vázquez.

Buscando patrocinios, ganó uno del secretario de Educación Pública, don Jaime Torres Bodet, al tenerlo frente a él, el funcionario le preguntó que, qué quería: “Hacer teatro”´, fue la respuesta. El secretario le prometió apoyarlo y siempre lo hizo.

Fue profesor del INBA y de la Academia Teatral de la Asociación Nacional de Actores, jefe del Departamento de Teatro del Injuve (Instituto Nacional de la Juventud), y durante más de 20 años estuvo al frente del Instituto Andrés Soler, donde formó a varias generaciones de actores.  

Asimismo, existe un premio que lleva su nombre.

Como dramaturgo es autor de El despertar de un pueblo, Escándalos en el Olimpo, Cristóbal Colón ante la reina Isabel, Faja de oro y De este lado, entre otras piezas.

Diversas fueron las obras que como director llevó a la escena: La zona intermedia; El hombre que hacia llover, Sandino debe nacer, Bodas de sangre, de Federico García Lorca; ¿Quién le teme a Virginia Woolf? de Edward Albee, Largo viaje de un día hacia la noche, El deseo bajo los olmos, ambas de Eugene O’Neill; La señorita Julia, de August Strindberg;El proceso Oppenheimer, El vigilante, Una gota de miel, A caza del amor, Los duendes y La verdad sospechosa, de Juan Ruiz de Alarcón; Rencor al pasado, de Osborne; Los desarraigados, de Jorge Humberto Robles, El vigilante, de Harold Pinter; Los duendes, de Luisa Josefina Hernández; Adorables enemigas (1ª puesta, con Carmen Montejo y Marga López) de James Kirkwood y Te juro Juana que tengo ganas, de Emilio Carballido, entre otros, son algunos de sus montajes memorables.  

Autor del volumen Medio siglo en escena (Instituto Nacional de Bellas Artes, 1995), un libro homenaje publicado como reconocimiento a Xavier Rojas, al cumplirse 50 años de su polifacética trayectoria en el teatro mexicano, al que Rojas está asociado por sus búsquedas y aportaciones como director, autor, crítico, productor, maestro y promotor, en los campos de "la experimentación, el teatro didáctico, asistencial, indígena, popular y estudiantil". Los dos primeros apartados, Álbum de familia y Una vida en el teatro, con textos autoreferenciales del director de escena, ofrecen información de primera mano sobre aspectos biográficos, influencias formativas, proyectos institucionales y puestas en escena, realizados entre 1944 y 1995.

En un segundo apartado se reúnen cerca de 50 testimonios, la mayoría de ellos correspondientes a hemerografía de época, que valoran el impacto artístico y cultural del trabajo escénico de Rojas. El volumen, ampliamente ilustrado, incluye una cronología general y un catálogo de obra, ordenados cronológicamente.

El Teatro El Granero. construido en 1954 en los terrenos del campo de polo Marte, como parte del conjunto de la Unidad Artística y Cultural del Bosque e inaugurado el 4 de septiembre de 1956. El proyecto estuvo a cargo del arquitecto Pedro Ramírez Vázquez, sobre la idea original del maestro Xavier Rojas quien fue el primer promotor del teatro círculo o en arena en México. El edificio fue construido ex profeso y el inmueble es propiedad del INBA. La primera representación fue Los desarraigados, de Jorge Humberto Robles Arenas, bajo la dirección de Xavier Rojas. Posteriormente fue restaurado y reinaugurado el 26 de noviembre de 2000 con la obra Strindberg.com/gurrola-Variaciones en torno a la más fuerte, de Juan José Gurrola.

Su característica principal es que el público se puede ubicar a los cuatro costados del escenario, lo que lo hace un foro versátil que permite a los creadores experimentar y jugar con el espacio.

Lleva ese nombre debido a que en ese lugar se encontraba el granero del coliseo que fue construido para llevar a cabo espectáculos exclusivamente hípicos, en lo que fuera la pista de prácticas del campo de polo 'Marte'.  
A partir del 30 de junio de 2003 se le agregó el nombre de su creador, Xavier Rojas. 

En los años 90 había dirigido ya más de mil puestas en escena, de autores como Tennessee Williams, Felipe Santander y Ramón del Valle-Inclán, entre muchos otros. En esa década el director regresó al Teatro El Granero para llevar a escena, bajo el sello de la Compañía Nacional de Teatro, la obra El eclipse, de Carlos Olmos, en homenaje a Xavier Rojas por sus 50 años como director teatral, la puesta en escena obtuvo 6 premios, entre ellos, Premio Juan Ruiz de Alarcón de la Asociación de Críticos de Teatro, como la mejor obra de 1990; Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), 1990. La obra ofreció una de las temporadas más largas que se recuerden en este recinto.  

Sin lugar a dudas, la más importante de las labores realizadas para conmemorar los 70 años del Palacio de Bellas Artes la conforma el amplio esfuerzo editorial realizado por el Instituto Nacional de Bellas Artes. Con respecto al libro 70 años de teatro, se hace mención de compañías, etapas, corrientes y personajes de la historia del teatro en México ligadas al recinto, como la Compañía Dramática de Bellas Artes, encabezada por María Teresa Montoya y Alfredo Gómez de la Vega, que derivó en la actual Compañía Nacional de Teatro. También se citan otras compañías como las de Virginia Fábregas, el teatro de revista con Roberto Soto, las representaciones de los Tenorios, el teatro musical con Manolo Fábregas; los teatros de la Universidad, de Orientación, Panamericano, el Proa, entre muchos otros.

Como personajes que forman parte de la historia del arte dramático en ese escenario la publicación cita a Fernando Wagner, José de Jesús Aceves, Xavier Rojas, Clementina Otero, Isabella Corona y Xavier Villaurrutia, entre otros.

El 1º de septiembre de 2007, alrededor de mil 300 documentos que registran más de 60 años de su trayectoria como director de escena e impulsor del teatro círculo en México, fueron donados a la Biblioteca de las Artes, del Centro Nacional de las Artes (Cenart), por el propio Xavier Rojas.

Libros, libretos auténticos, documentos hemerográficos y catálogos de las colecciones de los museos recorridos durante 365 días ininterrumpidos por Europa, son algunos de los materiales que forman parte del archivo personal del director teatral.

Autoridades del centro, afirmaron al momento de la recepción: recibimos con júbilo estos volúmenes que servirán a multitud de mexicanos y extranjeros. Le aseguramos, maestro Rojas, que este importantísimo material, que es la validación de su propia vida, está en buenas manos; sabremos resguardarlo, mantenerlo en estado óptimo, ponerlo al servicio de los usuarios y en una palabra, atesorarlo. Tenemos el honor de recibir en donación el trabajo de una vida ejemplar al servicio del arte en México.

En el acto, el maestro Rojas, se declaró "hijo de todos los teatros", respecto a los materiales de su colección que donó, aseveró que "enmarcan la labor de mi vida en el teatro", y que se trata de "materiales únicos".

El dramaturgo y director teatral Xavier Rojas falleció alrededor del mediodía del jueves 28 de enero, a los 89 años de edad, el cuerpo del maestro Rojas fue llevado, el viernes de las 12 a las 15 horas, al teatro El Granero, foro que lleva su nombre desde el 30 de junio de 2003.

Xavier Rojas, uno de los grandes promotores del teatro estudiantil, su fallecimiento significa una gran pérdida para el arte escénico. En el homenaje de cuerpo presente, los directores teatrales Enrique Singer, Luis de Tavira y Miguel Sabido, estuvieron presentes, entre múltiples personalidades del medio teatral mexicano.

Singer, titular de la Dirección de Teatro de la UNAM, afirmó que a Rojas se le debe una concepción propia de la estructura teatral

El director de la Compañía Nacional de Teatro, Luis de Tavira, afirmó que Xavier Rojas fue uno de los constructores de la modernidad teatral del México postrevolucionario, lo cual implicó una fractura importante con el pasado, pero que llevó a una reconstrucción del tejido teatral.

Sabido apuntó que Rojas fue una gente con preocupaciones sociales que se plasmaron en sus obras. Introductor de un realismo que influyó mucho dentro de la escuela de teatro, por lo que aportó mucho al arte escénico; es una gran perdida para el gremio teatral su fallecimiento.

 

El nombre de este extraordinario director, autor, promotor y gestor de teatro está escrito con letras de oro en la historia del teatro mexicano.

 

Descanse en paz.

 
  HOY ERES UNO DE NUESTROS 60698 visitantes COPYRIGHT RICARDO GUTIERREZ fotoricky@yahoo.com 04455.3493.9449  
 
ÁGORA TEATRAL Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis